Eres luz infinita sin forma


Nunca hemos visto nada que no sea la luz. Pero de tanto verla no la vemos. Sobre los objetos se manifiesta, sin ellos pasaría junto a nosotros sin ser advertida. 

Las cosas la reciben en sus brazos atómicos, se preñan de su movimiento diminuto, la gestan, la paren y acunan su berrinche caótico, y nos la envían a los brazos de los ojos calmada y dócil, tanto que nos llega con el rostro de sus padres-cosas.  

Pero la luz sería la misma luz aunque no hubiera en el universo nada más que luz, aunque ningún objeto la interrumpiera y reflejara. La luz da forma a las formas, límites a lo finito, pero no tiene forma ni tiene límites.

Tu ser es luz, infinito sin forma, tu luz ilumina tu objeto-tú, tu cosa-pensamiento, pero no eres ni tú ni pensamiento.  


Imagen cortesía de Mercedes Riveira tomada en Biarritz, donde además de los rayos de sol podemos ver multitud de otros fenómenos, como cielo verde y columna de luz, entre otros.

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