En el principio
En el principio le dimos forma a nuestros cuerpos con nuestras mismas manos, mientras se hacían, recreados de la tierra, flores y hojas del bosque trenzadas con la luz de tu mirada, la luz invisible con la que veo desde entonces, la misma con la que me mira el universo. Soy tú porque tú me hiciste, eres tú porque yo te hice. Cuando te abrazo me abrazo, lo que te hiere me duele a mí.
Mucho, mucho tiempo después nos lo hemos dicho por primera vez, como si hiciera falta aunque no hiciera falta: Nadie es menos, nadie un medio, todo un fin. Este es nuestro principio. Lo aprendí sin palabras de tus manos mientras me creabas, desnudos de valores, ideas, y metas.
Todavía escucho los ecos del principio en el silencio de los abrazos.
¿Cuál es el mayor regalo que se puede ofrecer a los demás? Amor y felicidad, que solo pueden existir cuando no hay pensamiento que menosprecie, juzgue, culpe o condene, ya sea a uno mismo o al otro. Extracto basado muy libremente en Pointers From Ramana Maharshi, por Ramesh S. Balsekar.
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